Río Bravo, Tamaulipas – Miguel Ángel Almaraz, recientemente electo alcalde de Río Bravo por un margen de casi 10 mil votos, se encuentra en plena preparación para asumir el cargo en uno de los municipios más polarizados de Tamaulipas, actualmente gobernado por Morena.
Durante su campaña, Almaraz subrayó la pésima calidad de las calles, la inseguridad y el rezago en los servicios primarios como los principales factores de rechazo hacia el gobierno saliente. Estas condiciones, según él, motivaron un voto de castigo que cimentó el respaldo a su candidatura, basada en 27 años de experiencia política. Cabe destacar que esta es la cuarta vez que Almaraz participa en la contienda por la Presidencia Municipal, y sostiene que en las elecciones de hace tres años fue víctima de un fraude que le arrebató la Presidencia. Sin embargo, en esta ocasión, el apoyo masivo de la ciudadanía impidió cualquier intento de manipulación por parte de la maquinaria oficial.
Desde la confirmación de su triunfo, Almaraz no ha perdido tiempo y se ha dedicado a formar un equipo de trabajo compuesto por ciudadanos que considera los mejores para enfrentar los desafíos del municipio. Estas reuniones, muchas de ellas realizadas en lugares públicos, buscan afinar los detalles de la próxima administración y se llevan a cabo de manera transparente, de cara al pueblo.
En redes sociales, Almaraz ha presentado a los futuros funcionarios de manera sencilla y directa, describiendo las funciones y el compromiso que cada uno de ellos asume con el municipio. Esta estrategia pretende mostrar la calidad y la preparación de los elegidos para llevar adelante su proyecto político.
La próxima administración tiene la responsabilidad de romper con los vicios que han afectado a Río Bravo en administraciones anteriores. La población espera que Almaraz, quien se presentó como una opción de esperanza, cumpla con sus promesas y logre mejorar las condiciones del municipio, que ha sufrido bajo gobiernos considerados ineficaces.
Por Martín Díaz / La Nube